El departamento de Ariège guarda una gran concentración de cuevas con arte rupestre. En la comuna de Montesquieu-Avantès se encuentra un magnífico sistema espeleológico formado por las cuevas decoradas de Tuc D’Audobert, Trois Frères y Enlène.

Tuc D’Audobert ya se conocía desde finales del siglo XVII o principios del XVIII, pero el arte rupestre fue descubierto en 1912 por los tres hijos del Conde de Bégouën. A lo largo del siglo XX se han encontrado nuevas expresiones artísticas.
Guarda numerosas herramientas y piezas trabajadas, huellas de pisadas del Magdaleniense y diferentes tipos de arte rupestre, grabados, pinturas, signos abstractos, una máscara antropomórfica… Pero el elemento realmente característico son las figuras de dos bisontes de arcilla modelada asentadas sobre un gran bloque de piedra, rodeadas de un círculo blanco.
Estas esculturas de arcilla son únicas en el mundo, sobre todo por la excepcionalidad del material. El artista los trabajó con los dedos, aunque utilizó algún instrumento en los acabados. Los cuerpos de los animales presentan fisuras, señal de que la arcilla se secó, mientras que la arcilla del entorno permanece fresca.
Aparecen a unos 650 metros de profundidad en la cueva, en un lugar de difícil acceso, se cree que pueden ser el resultado de las actividades de un chamán o rituales.
Se han contabilizado 103 representaciones de animales, pertenecientes a once especies diferentes, bisontes, caballos, renos, felinos… Es una cueva de temática muy diversa.
Las herramientas encontradas son del Musteriense (75.000-35.000 años) y del Auriñaciense (35.000-26.000 años), aquí vivieron por lo menos Neandertales y el Homo sapiens. El arte rupestre se ha situado en el Magdaleniense, pudieron haberse hecho hace unos 13.500-11.500 años.